Esta tarta es muy fácil y rápida de hacer, queda super jugosa. Yo la prepare con unos tomates que me regalaron buenísimos, estaban en su punto, rojos y con un sabor estupendos. Según mis hijos y mi marido la tarta estaba exquisita. Aquí os dejo la receta.
Ingredientes:
500 grs. de tomates rojos.
1 cebolla.
4 o 5 hojitas de albahaca.
Aceite de oliva virgen extra.
Sal y una pizca de azúcar.
5 huevos.
150 grs. de queso rallado.
2 cucharadas de pan rallado.
Elaboración:
Pelamos los tomates y los ponemos a trozos en una bandeja de horno. Le añadimos la cebolla cortada, las hojas de albahaca picadas, un poco de pimienta molida, la sal y la pizca de azúcar. Le echamos unas 3 o 4 cucharadas de aceite de oliva virgen y lo metemos en el horno precalentado a 180 grados durante 12 o 15 minutos, hasta que veamos que los tomates y la cebolla empiezan a dorarse un poco.
Sacamos del horno y a continuación batimos los huevos con el pan rallado y el queso (yo lo puse sin lactosa) y lo mezclamos con los tomates.
Si viéramos que los tomates han soltado mucho jugo le podemos quitar un poco con un cazo pero esto es opcional, a mi, me quedo muy jugosa. Lo metemos en el horno precalentado a 180 grados durante unos 15 minutos y sacamos. La podemos servir tanto fría como caliente.
Seguro que os gusta, sobre todo a los muy tomateros. Buen provecho.
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